DUENDE DE LAS SOMBRAS

Recitado
(recitado: A. Apo)

Juancito Ciruja, apenas diez años
ya se hizo amigo de mi insomnio. . .
No sólo se detiene en el saludo,
si no a parlotear con su gracia
de sus cosas del laburo. . . Erudito del papel,
de ése que es viejo en un día,
de la hojalata entendido,
que, en el arte del descarte
todo lo tiene aprendido. . .
Juancito Ciruja, apenas diez años,
mechón de pelo en la frente,
se viste como las sombras
que, Juancito és sólo eso,
tan solo, apenas, sombra . . .

Cantado
(letra: Osvaldo Ardizzone)
(canción – música Alejandro del Prado)

Anda silbando en la noche
detrás del carro cancino,
caballo y perro conocen
de memoria el recorrido. . .

Los árboles en la sombras
son como espectros dormidos,
para Juancito Ciruja
los espectros son amigos.

Manos Sabias que conocen
el valor de la basura,
Juancito no fue a la escuela
pero tiene su cultura. . .

Del invierno conoció
tormentas, lluvias, heladas,
en julio tuvo una tos,
ni la madre supo nada. . .

Cada vez que miró al cielo
sólo luna y estrellas vio,
de Dios le hablaron un día
pero él nunca lo encontró. . .

Antes que el sol alegre,
vuelven los tres a destino,
caballo y perro conocen
de memoria el recorrido. . .

El carro ya es una sombra
que se pierde, allá, a lo lejos,
Juancito duerme en sus sueños
trapos, latas, diarios viejos. . .